Búho Real
Descripción
El búho real es un ave muy grande y en ocasiones es considerado el búho más grande del mundo, aunque compite por este puesto con el búho de Blakiston, un poco más pesado, y el cárabo común, que no es tan pesado pero es más grande. 131-188 cm, y los ejemplares más grandes pueden alcanzar los 2 m. La longitud puede variar de 56 a 75 cm. Las hembras pesan de 1,75 a 4,6 kg y los machos de 1,22 a 3,2 kg. Aparte de las hembras más grandes, los búhos reales muestran poco dimorfismo sexual, aunque los machos generalmente tienen las crestas de las orejas más erguidas que las hembras. Por lo tanto, es casi imposible distinguir entre los sexos cuando se observa en la naturaleza.
Distribución
Se encuentra en la mayor parte de Eurasia, evitando las regiones tropicales de la India y el sudeste asiático (donde es reemplazado por búhos malayos, nepalíes, de Coromandel y de Bengala) y las regiones polares del Ártico (donde es reemplazado por búhos nivales). También evita regiones más secas como la Península Arábiga (reemplazada por búhos del desierto). No se encuentra en las Islas Británicas ni en las islas del Mediterráneo.
Alimentación
El búho real es probablemente la especie de búho más poderosa, capaz de atacar y matar presas muy grandes, superando con creces las capacidades de la mayoría de los otros búhos vivos. Además, esta especie tiene una dieta más variada que cualquier otra rapaz de su tamaño. Puede acomodar presas muy pequeñas cuando es la única presa disponible y presas grandes cuando es abundante. En general, el 55-80% de la dieta de un búho son mamíferos, la mayoría de los cuales pesan más de 100 gramos.
Reproducción
Son animales muy territoriales. Utilizan varios sistemas de señalización para delimitar sus territorios e indicar su ocupación, como el canto del territorio del posadero y el marcaje de rocas con heces. El tamaño del territorio de cada pareja varía ampliamente, dependiendo principalmente de la disponibilidad de presas, la densidad de parejas adyacentes y la tasa de rotación de individuos territoriales.
Los sexos suelen vivir solos y no se juntan hasta que llega el momento del cortejo. Cuando encuentran un buen sitio de reproducción, lo señalan cavando un pequeño agujero en el suelo y haciendo una serie de llamadas características.